Magnífico trabajo de Steven Spielberg.
Un grán película que consigue mostrarnos escenas e imágenes que quedarán grabadas en nuestra retina por siempre jamas. Tiene muchas y buenas escenas, pero la mejor y más impactante es la primera en la que aparecen los "trípodes", las máquinas en las que se desplazan los extraterrestres, cuando la veais me comprenderéis. La primera media hora de acción es impresionante y consigue meternos verdadero miedo en el cuerpo, gracias a la credibilidad que aportan las imágenes, por la perfección de los efectos especiales.
Una historia típica de invasión extraterrestre, pero vista desde un punto de vista muy distinto al de Independence Day. Aquí no hay grandes planes, ni nada a nivel planetario. En esta película veremos la angustia de una familia desestructurada por escapar de la invasión y alcanzar algún lugar seguro, envueltos en un caos que no comprenden y que les trastorna totalmente. Toda la visión de la película se restringe a la familia en cuestión, de modo que apenas insinuan lo que está ocurriendo en el resto del planeta, algo muy innovador y refrescante.
No voy a compararla con el clásico de 1953, aquella película me gustó mucho a pesar de que era un compendio de tópicos sobre invasiones. La película de Spielberg rompe muchos de esos tópicos. Es una película perfectamente realizada con un gran ritmo a lo largo de casi toda su duración, excepto en el tramo en el que aparece un desquiciado Tim Robbins, pero esta parte de la película guarda otras joyas, veremos de lo que es capaz un padre con tal de salvar a su hija.
Los actores muy correctos, con un Tom Cruise sorprendente, por lo bien que hace su interpretación, demostrando que se ha estudiado el papel muy a fondo. La niña interpretada por Dakota Fanning, es magistral, una niña prodigio con un futuro demoledor.
En definitiva, una película que no te aburrirá, con grandes dosis de acción, aderezadas con unos efectos especiales magistrales, y con momentos de grandísima tensión.
Buena película.